En el paradigma pospandémico y la nueva era del trabajo, el enfoque ha pasado de la emoción a la empatía; escuchar activamente y comprender al personal se ha convertido en algo fundamental para fomentar la implicación en toda la organización.
La creación de un sentido de comunidad en los equipos ayuda a los empleados a tener una sensación de seguridad emocional en el lugar de trabajo, lo que hace que se impliquen más.
Identificar las estrategias y oportunidades que más les importan ayuda a lograr una implicación significativa, lo que repercute enormemente en los objetivos empresariales.
En este libro blanco, profundizaremos en: